lunes, 30 de noviembre de 2015

DIETA DUNKAN

Se emplea principalmente para alcanzar el peso ideal.
Su origen procede de Pierre Dunkan, es un médico francés que ideó esta dieta.

Destaca en ella un término; "PESO JUSTO", que va a ser el peso que es posible mantener a largo plazo.
En el caso de esta dieta, para saber cuál sería el peso justo de cada uno se calcularía mediante parámetros genéticos y hereditarios, así como los corporales como son el peso y la altura.
La dieta Dunkan se caracteriza porque se divide en 4 fases o bloques, en los que se combinará el consumo de 100 alimentos de origen vegetal o animal y que son ricos en proteínas pero bajos en grasas o azúcares. Destacando la avena.




FASES DE LA DIETA:

  • Dieta Dunkan o fase de ataque:
Dura aproximadamente una semana, su objetivo es perder peso de forma rápida, consumiendo solo proteínas puras. 72 de los alimentos serán proteínas animales, y estas serán las que se podrán consumir son restricción en la cantidad.
  • Fase de crucero:
Se alternarían proteínas animales con vegetales,pudiendo consumir cualquiera de los 100 alimentos.

  • Fase de consolidación:
En esta fase se irá añadiendo a esos 100 alimentos otras comidas, de forma progresiva, evitando así engordar de nuevo. Para esto habrá que dedicar un día, el jueves, a ingerir solo proteína pura.


  • Fase de estabilización:
Según Dunkan podrán ingerirse todos los alimentos que se quiera siguiendo 3 normas:
    -Jueves será el día de tomar solo proteínas pura.
    -Ejercicio físico durante 20 minutos al día como mínimo.
    -Avena como alimento estrella, tomando al menos 3 cucharadas soperas al día.

TRASTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA Y NUEVAS TECNOLOGÍAS

Nunca antes en la historia del hombre hubo tal cantidad de información accesible a la casi totalidad de la población. Las tecnologías de información y comunicación (TIC) y el acceso a Internet son consumidas por adolescentes en grandes cantidades (algunas encuestas sitúan el número de horas ante el ordenador, videojuegos, móvil, DVD y TV en siete horas al día o más). Los problemas que nos preocupan de esto son sobre todo el acoso telemático, la adicción y el acceso a la pornografía, dando lugar en ocasiones a una sexualidad banalizada, machismo y violencia, que puede hacer mucho daño a los jóvenes.
Las redes sociales nos han ayudado a ampliar el mundo de los contactos, las comunicaciones, saber cosas de personas lejanas y compartir experiencias instantáneamente. Pero a la vez surgen varios problemas como son el vacío legal que existe, los contenidos dañinos y el fácil acceso a información que para muchas personas puede resultar perjudicial para su la salud.
Los jóvenes son  más propensos a ser influenciados rápidamente por las cosas que leen o ven por Internet. En este caso vamos a hablar de pacientes con un problema existente como es la anorexia y bulimia, que describimos en entradas anteriores. Estos enfermos encuentran en las redes sociales una especie de refugio, en el cual se sienten comprendidos e identificados por otros usuarios, con quienes comparten experiencias, formas de no comer o vomitar, modos de engañar a los familiares.

En el 2012 una conocida red social como es Instagram incluyó en su lista de etiquetas prohibidas las ligadas a estos trastornos alimenticios como #probulimia, #proanorexia, #loseweight, #thinspo, #thinspiration, etiquetas que dejaron de ser aptas. Sin embargo se ha creado una nueva moda de etiquetas “ana” (anorexia) y “mia” (bulimia), que generan nuevas etiquetas creando un ya conocido lenguaje propio de estas pacientes: purge (purga, vomitar), ED (eating disorder, desorden alimentario) o edwarriors (soldados o luchadores de los ED). Existen datos alarmantes que indican que hay cerca de dos millones de publicaciones etiquetadas con el hashtag #ED, dos millones y medio con #anorexia y casi cuatro millones detrás de #ana y #mia.

Se suman a esto las fotografías de cuerpos esqueléticos, trucos para adelgazar, consejos para ocultar la enfermedad a los padres…Esta red social, por encima del resto, se ha convertido en un patio de recreo de pacientes con trastornos de la conducta alimentaria. Desinformación incontrolada, con falsos mitos y datos incorrectos altamente peligrosos para la salud y para un correcto desarrollo físico y emocional.
Hay consejos básicos que deben conocer los padres para poder informar a sus hijos que cada vez más precozmente pueden acceder a redes sociales sin suficientes garantías para su intimidad y seguridad.




VIGOREXIA

La vigorexia es un trastorno por el que se presenta una preocupación obsesiva por el físico y una distorsión del esquema corporal, o dismorfofobia.
Este trastorno, al contrario que los anteriores, está más presente en hombres que en mujeres.

Las manifestaciones que este trastorno puede tener son:

  • Excesiva actividad deportiva: para conseguir aumentar su musculatura.
  • Comer en exceso: se consumen carbohidratos y  proteínas en exceso para conseguir subir de peso, y aumentar la masa muscular. Además se reduce el consumo de lípidos.
La vigorexia, por consiguiente, a menudo cursa con trastornos alimenticios y con un cuadro obsesivo-compulsivo


Las principales consecuencias de este trastorno son: 
  • Aislamiento social: esto se debe al carácter obsesivo que desarrollan por obtener un cuerpo físicamente perfecto, pasando largas horas entrenando en el gimnasio y realizando ejercicio físico.
  • Alteraciones metabólicas: con el fin de ganar masa muscular, muchos consumen esteroides anabolizantes, además de la ingesta inadecuada de nutriente en la dieta.
  • Consecuencias físicas: el exceso de actividad física puede producir daños en la musculatura, articulaciones y tendones. 

Los principales factores desencadenantes de la vigorexia son: sociales, culturales y educativos. 
Por ello, el tratamiento para este trastorno está centrado en modificar la conducta y los pensamientos que se tiene sobre su propio cuerpo mediante una terapia cognitivo-conductual.  De esta manera se puede trabajar sobre la autoestima, la imagen corporal y la conducta con respecto a las horas dedicadas a la actividad física, la mala alimentación y el consumo de anabolizantes. 






domingo, 29 de noviembre de 2015

BULIMIA: PREVALENCIA Y PREVENCIÓN

Prevalencia de la bulimia
2,4% de cada 100 adolescentes desarrolla bulimia, convirtiéndose de este modo una de las enfermedades más comunes entre los adolescentes. Y no sólo el sexo femenino se está enganchando a los trastornos de la alimentación, también los varones han empezado a verse reflejados significativamente en las estadísticas. 
Es importante tener presente que la prevención es la herramienta más importante que los padres tienen ante la posibilidad de la aparición de un trastorno de la alimentación.

¿Cómo prevenir la bulimia?
Para poner en práctica las medidas preventivas es necesaria la participación de toda la familia, y todo el equipo interdisciplinar de salud. Para ello la familia debe estar atenta a las conductas no habituales que tenga el/la adolescente, como por ejemplo:
- Retirarse habitualmente de la mesa para ir al baño.
- No querer compartir la comida familiar en determinadas ocasiones.
- Realizar ejercicios físicos en forma extrema.
- Ocultar comida.
- Levantarse por la noche para comer.

En cuanto a los profesionales de la salud, deben estar atentos a determinados parámetros de sangre como el potasio, sodio, hepatograma, glóbulos rojos, y del peso/edad y peso/talla.

Cabe mencionar que si dentro de una familia, la mayoría de sus integrantes son obesos o tienen sobrepeso, la probabilidad de que un adolescente miembro de esa familia padezca de obesidad es alta, por ello una de las formas de evitar trastornos de la alimentación como la bulimia, es tratar la obesidad familiar. La realización de un plan de alimentación supervisado por un médico, reduce la posibilidad de que la o el joven padezca este tipo de trastorno.







TRATAMIENTO DE LA BULIMIA

La bulimia se trata de una enfermedad caracterizada por los atracones (ingestión de gran cantidad de alimentos) que se da una persona, seguido de acciones como vomitar, consumo de laxantes... para evitar el aumento de peso.
El tratamiento de la bulimia ha de ser constante, pero raramente se necesita la hospitalización, a menos que padezca otras enfermedades o trastornos, como pueden ser:

  • Anorexia.
  • Depresión mayor.
  • O la necesidad de diversos fármacos para suspender las purgas.


En ocasiones se siguen unos pasos para tratar la bulimia, dependiendo de la gravedad de esta:
  1. La necesidad de crear grupos de apoyo es muy importante.
  2. La terapia nutricional y el diálogo individualizado es el paso siguiente si no funcionan los grupos de apoyo.
  3. El uso de antidepresivos (recaptadores de la serotonina).
Hay personas que abandonan los programas debido a las bajas expectativas de curarse, es necesario tener en cuenta lo siguiente:
  • Puede que haya que probar distintos tratamientos para dar con el adecuado.
  • Es probable las recaídas, que la bulimia reaparezca.
  • Es un proceso largo, co
    mplicado y doloroso, y necesitará el apoyo de familiares y amigos.

BULIMIA

La bulimia, también denominada bulimia nerviosa, es un trastorno de la conducta alimentaria que se caracteriza por una ingesta de gran cantidad de alimentos en un periodo corto de tiempo, "atracones", seguidos de conductas compensatorias por la vergüenza o culpa, como producirse el vómito o el consumo de laxantes o diuréticos, "purgarse".

Las causas por las que se produce este trastorno aún son desconocidas, pero factores genéticos, sociales o culturales, pueden estar involucrados en su aparición.

La bulimia puede pasar desapercibida durante bastante tiempo, ya que los bulímicos suelen ocultar los episodios de atracones y purga. Los síntomas incluyen:

  • Incapacidad para dejar de comer, hasta el punto de malestar físico, en períodos cortos de tiempo
  • Secretismo al comer
  • Intervalos entre comer en exceso y ayunar: no tiene control sobre su alimentación, comiendo mucho o nada
  • Purgarse mediante vómitos, consumiendo laxantes o diuréticos
  • Exceso de ejercicio físico
  • Signos físicos: callos o cicatrices en dedos o manos, mejillas hinchadas, dientes descoloridos, todo ello por provocarse el vómito, y fluctuaciones en el peso, debido a los episodios de atracón y purga. 

sábado, 28 de noviembre de 2015

TRATAMIENTO DE LA ANOREXIA NERVIOSA

El objetivo principal del tratamiento de la anorexia nerviosa es la recuperación del peso corporal, pues muchos de los pensamientos alterados con respecto a comida o figura están sustentados por la malnutrición. Normalización de la dieta y hábitos alimentarios son un paso fundamental en el proceso terapéutico.
El segundo objetivo es resolver los problemas psicológicos, familiares o sociales asociados.


1.- Recuperación ponderal
La rehabilitación nutricional y la normalización dietética corrige las secuelas físicas y psicológicas que la malnutrición mantiene.

2.- Tratamiento dietético
Es muy variada la opinión de si la realimentación debe partir de unos contenidos calóricos normales o bien reiniciarla a partir de dietas bajas en calorías. Por el contrario la alimentación nasogástrica y la parenteral deberá ser prudente, y sólo aplicada de una manera puntual, en un programa concertado y nunca dejarla permanente, que no sea una comodidad y sí un recurso terapéutico.

3.- Tratamiento psicológico
Las intervenciones psicoterapéuticas son poco efectivas en las fases más graves de la enfermedad, las pacientes malnutridas y en bajo peso se muestran reacias a la psicoterapia y difícilmente se observan cambios hasta que no se ha recuperado determinado peso. Los grupos de apoyo, las técnicas de relajación y las sesiones psicoeducativas ayudan a que la paciente no caiga en el pensamiento de que solamente está ingresada para ganar peso.


4.- Tratamiento farmacológico
Está indicado como coadyuvante de las técnicas de modificación de conducta y como tratamiento de la psicopatología asociada, especialmente la depresión.
Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina se han utilizado en el tratamiento de la anorexia nerviosa, como puede ser el Prozac.

5.- Terapia familiar
Aunque al principio se mantenía a la familia alejada del tratamiento de las chicas con anorexia, progresivamente se fue implicando a la misma tanto a nivel ambulatorio como en régimen de hospitalización.


Régimen de tratamiento: Ingreso hospitalario, hospital de día o tratamiento ambulatorio

1.- Ingreso hospitalario


CRITERIOS DE HOSPITALIZACIÓN
I
Pérdidas de peso de un 25 a 30%, del que corresponde en aquel momento por edad y estatura
II
Enfermedades físicas, secundarias o no a la anorexia, que requieran hospitalización, por ellas mismas o porque asociadas a la anorexia les imprime mayor gravedad
III
Trastornos psiquiátricos graves: ansiedad, depresión y riesgo de suicidio
IV
Grave conflicto familiar generado por el trastorno alimentario
V
Fracaso confirmado y reiterado del tratamiento ambulatorio o del hospital de día


2.- Tratamiento en Hospitales de Día
Las ventajas de los hospitales de día está en la reducción de tasa de ingresos hospitalarios y la no separación de los pacientes de su ambiente habitual. Se basa esencialmente en la terapia grupal

ANOREXIA: PREVALENCIA

Estimar la prevalencia para los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), como es la anorexia, es muy difícil. Sin embargo, los datos apuntan a que esta cifra ha aumentado en los últimos años en los países desarrollados, debido a los cambios socioculturales y a un mejor diagnóstico. En estos países la prevalencia de los TCA se estima en un 5-10%, mientras que la prevalencia de la anorexia nerviosa se estima en un 1%afectando a un hombre por cada 9 mujeres. 

En España la prevalencia de trastornos de la conducta alimentaria se estima en un 4,1-4,5% en la población adolescente, estimando la prevalencia de anorexia nerviosa en mujeres entre un 0,3-0,9%. Solo un un 5-10% de los afectados son hombres, ya que en ellos es más frecuente la bulimia. 

La anorexia es más frecuente en bailarinas, atletas, gimnastas, modelos y adolescentes con un elevado rendimiento académico, lo cual suele estar ligado a conductas perfeccionistas y de autoexigencia.

Las medidas de prevención para la anorexia son muy importantes, ya que las consecuencias en la salud de una persona que sufre este trastorno son graves. Para ello podemos habñar de dos tipos de prevenciones:

  • Prevención Primaria: se trata de proporcionar información sobre los riesgos de la anorexia, a las poblaciones de riesgo. Además, se debe trasmitir un mensaje a las familias y adolescente sobre pautas que ayudan, indirectamente, a prevenir los TAC, por ejemplo: fomentar una alimentación saludable, la comunicación en la familia, fomentar la autoestima...
  • Prevención Secundaria: se trata del diagnóstico precoz de la enfermedad. Cuanto antes se diagnostique, mejor es la evolución y el pronóstico. Para ello es importante la identificación de personas en alto riesgo de desarrollar este trastorno, para poder realizar una intervención precoz. 

ANOREXIA

La anorexia es un trastorno alimentario que lleva a las personas que lo padecen a bajar su peso más de lo que se considera saludable para su edad y estatura.
Las personas que sufren anorexia tienen un miedo irracional a aumentar de peso de forma que realizan ejercicio de forma excesiva o empiecen dietas para seguir bajando de peso.
Las causas que producen anorexia son desconocidas, aunque se piensa que las hormonas y los genes pueden estar involucrados, así como el ambiente social en que se mueva la persona y si se promueve la delgadez o no.



Hay unos factores de riesgo a destacar:

  • Haber padecido durante la niñez un trastorno de ansiedad.
  • Prestarle demasiada atención al peso y a la figura.
  • Sufrir problemas de alimentación durante la lactancia o la primera infancia.
  • Pensar en cánones de belleza erróneos.
  • Ser demasiado perfeccionista o demasiado estricto con uno mismo.
  • La edad de comienzo de la anorexia es durante la adolescencia o a principios de la adultez, siendo más frecuente en mujeres.
SÍNTOMAS
  • Miedo intenso a aumentar de peso.
  • No querer mantener, ni acercarse al peso ideal para su edad y estatura.
  • Tener una imagen distorsionada de su físico.
  • Limitar el consumo de alimentos.
  • Provocarse el vómito.
  • Desmenuzar el alimento y moverlo por el plato en lugar de ingerirlo.
  • Hacer ejercicio a todas horas.
  • Ir al baño justo después de las comidas.
  • No comer con otras personas.
  • Uso de diuréticos, enemas, laxantes, pastillas para adelgazar...
  • Piel amarillenta, reseca o cubierta con vello fino.
  • Pensamiento aletargado, mala memoria o menor capacidad de discernimiento.
  • Depresión.
  • Sensibilidad al frío.
  • Atrofia muscular y pérdida de masa corporal.
  • Perdida de la fortaleza ósea.


viernes, 27 de noviembre de 2015

TRATAMIENTO OBESIDAD

El tratamiento para la obesidad se centra en promover un estilo de vida saludable mediante una serie de intervenciones en el estilo de vida del adolescente, que incluyen una dieta sana y variada, actividad física regular y modificar la conducta alimentaria. 
En casos excepcionales en los que estas intervenciones fracasan,se recurre a los fármacos para ayudar a la pérdida de peso, siendo el único aceptado para su uso en adolescentes la metformina
La cirugía en adolescentes es totalmente excepcional. Solo se ha de realizar cuando la obesidad es muy grave y las anteriores medidas terapéuticas han fallado.

En niños y adolescentes existen tres etapas en las que se debe realizar el tratamiento:
  • Etapa inicial del tratamiento: en ella se pretende estabilizar el peso e inculcar hábitos alimentarios y de estilo de vida saludable. Para ello se necesita del cambio de conducta en el entorno familiar.
  • Etapa de adhesión al tratamiento: en ella se pretende asegurar la comprensión, aceptación y realización del tratamiento. Se inicia la pérdida de peso, marcando unos objetivos. Durante esta etapa es muy importante el seguimiento del niño/adolescente, para así valorar su capacidad de adhesión al tratamiento.
  • Etapa de mantenimiento: en ella se supervisa la consolidación de los hábitos alimentarios y la práctica de actividad física de manera regular.
En el tratamiento se realizan una serie de intervenciones en el estilo del vida del paciente que se deben combinar para un mejor resultado: 
  • Intervenciones de la dieta
Las dietas que se suelen utilizar para promover la pérdida de peso son las dietas bajas en calorías y las que modifican alguno de los macronutrientes (ricas en proteínas o en fibra, con índice glucémico bajo o pobres en grasas).

La más utilizada es la dieta del semáforo o Traffic Light Diet (TLD). Esta consiste en clasificar los alimentos en tres categorías: 
  • Verde: alimentos que contienen entre 0-1,9 gramos de grasas por plato.
  • Amarillo: alimentos que contienen entre 2,0-4,9 gramos de grasas por plato.
  • Rojo: alimentos que contienen 5 gramos de grasa o más.
Con esta dieta se pretendo conseguir que el niño o adolescente consuma más alimentos "verdes" y reduzca el consumo de alimentos "rojos".

A pesar de ser la más utilizada, cualquier dieta que sea sana y equilibrada siguiendo la pirámide de alimentación saludable puede resultar útil a la hora de perder peso. 
Lo mejor es que un profesional de la salud especializado en niños y adolescente recomiende una dieta a seguir y le haga un seguimiento del tratamiento, prestando atención a la posible aparición de un trastorno de la alimentación.
  • Intervenciones de la actividad física y disminución del sedentarismo:  
La realización de ejercicio físico, en combinación con la dieta, es muy importante para conseguir reducir peso. 

Se recomienda realizar ejercicio durante más de una hora al día: jugar al aire libre, pasear, subir/bajar escaleras, participar en las tareas del hogar... 
Sobre todo es importante que el adolescente realice una actividad que sea adecuada a su edad y de su interés. Con esto se pretende que el hacer ejercicio físico sea algo que el adolescente disfrute y así poder hacer una progresión en cuanto a la duración e intensidad de la actividad.

Además, se recomienda limitar el tiempo que el adolescente pasa mirando la televisión, jugando a videojuegos o en el ordenador a 1 hora y media al día como máximo. 

  • Tratamiento psicológico:
Es muy importante el apoyo emocional al adolescente con obesidad. Los padres deben también estar interesados por su situación y mantenerse informados para fomentar la motivación del adolescente a seguir el tratamiento, ya que esto puede resultar muy difícil.

El tipo de terapia más utilizada es la terapia cognitivo-conductual, que se centra en modificar conductas alimentarias. Esta modificación debe realizarse de manera progresiva y lenta, asegurándose de que los cambios realizados están estabilizados en el paciente. 
Las intervenciones básicas que se utilizan en esta terapia son: 
  • Técnicas de autocontrol: autoobservación, registro de comida, control de estímulos...
  • Reestructuración cognitiva: detectar pensamientos negativos irreales por ideas más apropiadas...
  • Focos de trabajo: autoestima,actitud ante crítica, imagen corporal, refuerzo de logros conseguidos...
  • Manejo de dificultades: aprender conductas alternativas a comer, manejo del estrés, habilidades sociales, entrenamiento en resolución de problemas...
  • Seguimiento y evolución: reevaluación y feedback de los cambios producidos y mantenidos.

DESCRIPCIÓN OBESIDAD

Diversos conceptos

La obesidad consiste en el acúmulo de tejido graso en el organismo en relación con otros componentes corporales, y es el resultado de un balance energético positivo. Un niño presenta obesidad cuando su IMC (peso en kg entre altura m2) sobrepasa en dos o más desviaciones estándar el valor medio de este parámetro estimado en individuos de la misma población, edad y sexo. 
Se tiene sobrepeso cuando el individuo presenta un exceso de tejido graso, pero su IMC no sobrepasa más de 2 derivaciones estándar en iguales condiciones que las anteriores.
Para la edad pediátrica se definieron los valores de IMC para cada sexo entre 2 y 18 años con los valores de 25 y 30 kg/m2 del adulto, equivalente a puntos de corte de sobrepeso y obesidad. Los niños y adolescentes con sobrepeso se corresponden con un percentil 85 y la obesidad con el percentil 95.
El término “obesidad mórbida” se usa en aquellos individuos con comorbilidades asociadas a la obesidad.


Etiología. Factores de riesgo

Se tienen en cuenta factores individuales y biológicos (metabólicos y genéticos), así como los conocimientos, actitudes y comportamientos. Las influencias biológicas contribuyen entre un 30-70% en la determinación de la obesidad y las ambientales en el grado. También una ingesta de alimentos ricos en grasas, pobres en agua y fibra y el incremento del tamaño de las raciones. El ambiente económico, político y sociocultural facilitará las causas anteriores.
Los factores de riesgo (FR) de obesidad son:

  • Factores genéticos. Diversos estudios han encontrado asociación entre el IMC de los padres y de los hijos a partir de los 3 años. Si uno de los padres es obeso, el riesgo se triplica, si son ambos se multiplica por 15. También se hereda el patrón de distribución de la grasa, de la masa magra y otros FR cardiovascular
  • Exposición durante el periodo fetal
  • Peso al nacimiento. Se ha observado una asociación positiva entre macrosomia (más de 4 kg al nacimiento) y padecer obesidad en la infancia y edad adulta. También hay una relación entre el bajo peso al nacimiento y el síndrome metabólico con mayor riesgo para la obesidad central. 
  • Alimentación en el primer año de vida. Protección de la Lactancia materna (LM). 
  • Precocidad del rebote adiposo. En las curvas del IMC se identifica un crecimiento en el primer año de vida que decrece posteriormente llegando a valores mínimos entre los 5-6 años, momento en que se produce un nuevo aumento hasta la edad adulta. Esto es el “rebote adiposo” y cuando se produce precozmente (<5 años) se asocia con mayor riesgo de obesidad en la edad adulta.
  • Etapa de la adolescencia y maduración sexual precoz. La adolescencia es una etapa de riesgo, ya que la probabilidad de que un niño obeso se convierta en adulto obeso aumenta del 20% a los 4 años de edad a un 80% en la adolescencia. La aparición precoz de la menarquía (< o igual a 11 años) incrementa el riesgo de OB en la época adulta.
  • Sexo y edad. Diversos estudios han observado una prevalencia de obesidad superior en los varones. 
  • Nivel socioeconómico (NSC). El NSC elevado es un FR de OB en los países pobres y en los de transición. 
  • Distribución geográfica. El medio rural parece ser un factor de protección de la obesidad en los países pobres y de transición nutricional, sin embargo, en estudios en países desarrollados se ha identificado como de riesgo.
  • Estilo de vida (dieta, ejercicio físico, sueño, etc.)
  • Sociedad. Influencia de los medios de comunicación, la escuela, el barrio y la ciudad en que se vive. 


Clasificación


  • Obesidad exógena: es la más frecuente de las causas de obesidad, siendo la etiología multifactorial. La acumulación del exceso de energía en forma de tejido adiposo es debida a la existencia de una inadecuada nutrición, así como una disminución de la actividad física.
  • Obesidad monogénica: causas hipotalámicas. 



Comorbilidad asociada

Existen diversas consecuencias para la salud de la obesidad infantil, que  incluyen numerosos problemas médicos que pueden verse en la tabla II. Además se exponen al riesgo de continuar padeciendo obesidad en la edad adulta.

PREVALENCIA Y PREVENCIÓN DE LA OBESIDAD

PREVALENCIA DE LA OBESIDAD
La obesidad es un estado patológico que se produce por una acumulación de grasa en el cuerpo, de una forma excesiva.
Algunos datos relevantes acerca de la obesidad:

  • Desde el año 1980 los casos de obesidad se han duplicado.
  • En el año 2014, mas de 1900 millones (el 39%) de personas adultas de más de 18 años tenían sobrepeso, y, dentro de esos 1900 millones 600 de ellos (13%) tenían obesidad.
  • La mayor parte de las personas habitan países en los que la muerte por sobrepeso tiene mayor incidencia que por insuficiencia ponderada (que consiste en estar por debajo del peso que se considera saludable).
  • En el año 2013, 42 millones de niños menores de 5 años tenían obesidad.
PREVENCIÓN DE LA OBESIDAD
Es muy importante tener un estilo de vida saludable, y que los padres y familiares eduquen a los pequeños a llevar una alimentación sana y equilibrada.
Un ejemplo de estilo de vida saludable sería:


  • Tener una buena alimentación, haciendo balance entre las calorías consumidas y el ejercicio diario.
  • No excederse en las raciones de comida.
  • Mantenerse activo y realizar actividades físicas.
  • Estar al tanto de su peso, hablar con el médico de su índice de grasa corporal ideal, e intentar obtenerlo sin llegar a obsesionarse.

jueves, 26 de noviembre de 2015

BULLYING (ACOSO ESCOLAR): PREVECIÓN EN LOS CENTROS EDUCATIVOS

Es importante intentar prevenir el bullying y la violencia en las aulas a través de la educación y de las relaciones entre la escuela y la familia. En la mayor parte de los casos las causas están en esos entornos y es allí mismo donde hay que intentar atajarlas. 

Prevención en las escuelas: Cómo comenzar
En primer lugar se debería evaluar la prevención en la propia escuela y los esfuerzos de intervención en cuanto a la conducta del alumno, incluidos la violencia y el consumo de sustancias. Determinar la frecuencia de los casos de acoso, dónde ocurren, cómo intervienen los estudiantes y los adultos, y la eficacia de sus esfuerzos de prevención.

Comprometer a padres y jóvenes 
Es vital que todos en la comunidad trabajen para enviar un mensaje unificado contra el acoso. Para ello una idea es realizar una campaña para que los padres, las escuelas y los miembros de la comunidad conozcan los objetivos. Se trataría de un comité de seguridad escolar o grupo de trabajo para planificar, implementar y evaluar sus programas de prevención del acoso en la escuela.

Elaborar políticas y normas 
Otra mediada sería elaborar un código de conducta, normas para toda la escuela y un sistema de informes sobre el acoso. Las mismas establecen un ámbito donde el acoso no es aceptable. Difundirlo y comunicarlo ampliamente es también importante.

Creación de un entorno seguro 
Desarrollar una cultura escolar de aceptación, tolerancia y respeto. Se puede usar las reuniones del personal, juntas, clases y reuniones de padres, los boletines informativos para las familias, el sitio web de la escuela y el manual del estudiante para establecer un ámbito escolar positivo. El objetivo es  consolidar las interacciones y las inclusiones sociales positivas.

Educar a los estudiantes y al personal escolar
Para ello es de utilidad elaborar material de prevención contra el acoso en el plan de estudios y las actividades escolares. Capacitar a los maestros y al personal sobre las normas y políticas escolares es así mismo recomendable. 

Instar a los niños a hacer lo que les gusta
Ayudar a los niños a participar en actividades, intereses y pasatiempos que les agraden. Los niños pueden realizar trabajos voluntarios, practicar deportes, cantar en un coro o unirse a un grupo juvenil o club escolar. Estas actividades permiten que los niños se diviertan y conozcan a otras personas con los mismos intereses. Pueden desarrollar la confianza y generar amistades que ayuden a proteger a los niños del acoso.

Dar el ejemplo de cómo tratar a otros con amabilidad y respeto

Los niños aprenden del ejemplo de los adultos. Al tratar a otros con amabilidad y respeto, los adultos demuestran a los niños que no hay lugar para el acoso. Aun cuando parece que no prestan atención, los niños escuchan cómo los adultos manejan el estrés y los conflictos, y cómo tratan a sus amigos, colegas y familiares.

BULLYING

El bullying, o acoso escolar, es cualquier forma de maltrato, físico, psicológico o verbal, que se produce entre estudiantes de manera repetida en el tiempo, en el ámbito escolar o en redes sociales. 

Se trata de un tipo extremo de violencia escolar, en el que el comportamiento agresivo debe estar acompañado de:

  • Desequilibrio de poder: los niños/adolescentes que acosan hacen uso de su poder, ya sea fuerza real o percibida subjetivamente (popularidad), para poder controlar, dañar o intimidar a otros. Este desequilibrio puede cambiar a lo largo del tiempo o en distintas situaciones, aún estando involucradas las mismas personas.
  • Repetición: el comportamiento agresivo del acosador es muy probable que o sucede más de una vez.
A grandes rasgos, el acoso escolar se puede clasificar en tres clases:
  • Acoso Físico: cualquier acción que afecte físicamente a la víctima y/o a sus pertenencias. Se incluyen: agresiones físicas (empujar, pegar, arañar...), robar, romper pertenencias de la víctima...
  • Acoso Verbal: acciones que tienen la finalidad de causar un daño psicológico o moral, afectando a la autoestima de la víctima. Se incluyen: burlas, poner motes, insultar, provocar, amenazar, ridiculizar, despreciar...
  • Acoso Social: acciones que llevan a dañar la reputación de la víctima y sus relaciones. Lo que se pretende es su aislamiento y marginación social. En este grupo debemos destacar el ciberacoso/cyberbullying/acoso cibernético, en el que se utilizan las redes sociales para realizar el acoso social. Se incluyen: dejar de lado a la víctima, convencer a otros de hacer lo mismo, avergonzar públicamente, crear rumores falsos...
El acoso escolar suele producirse en las horas lectivas y en el centro educativo, también en los alrededores del centro y horas cercanas a las lectivas. Sin embargo, puede producirse fuera de las horas lectivas y ni siquiera estando presentes como ocurre en el acoso cibernético.

Al contrario de lo que suele pensar la mayoría de las persona, el bullying no se debe a una sola causa, sino a un conjunto de ellas: las características psicológicas del agresor, su situación familiar, el entorno escolar, los medios de comunicación y cultura de violencia. Más información sobre las razones de la agresión escolar.

TRATAMIENTO DEL BULLYNG

El bullyng es una intimidación (con conducta agresiva e intenciones de dañar a la otra persona) entre los adolescentes, y tiene que tener un periodo mínimo de cuatro meses, produciéndose este de forma constante.




Para enfrentarse a estas situaciones de acoso es muy importante hablar con el adolescente para conocer el problema desde dentro, su personalidad, su forma de resolver y manejar conflictos, ya que en la mayoría de las ocasiones estos no saben como afrontarlos.
Es muy importante trabajar con su autoestima, para que aprenda a respetarse a si mismo, a ver las cosas buenas de su personalidad, enseñándole a conocer sus habilidades para reforzar su actitud a la hora de enfrentarse a este tipo de situaciones.
Por tanto el tratamiento psicológico es muy importante.
También en el ámbito familiar, ya que los padres han de conocer el problema y aprender a afrontarlo, ayudando a reforzar la conducta de su hijo, conversar con ellos del tema y estimular sus habilidades y su personalidad.




Este problema debe tratarse desde el foco también, en el colegio por ejemplo, si se diese el caso, con la necesidad del apoyo de otros estudiantes, que le brinden protección, así como el desarrollo de actividades y talleres que fomenten la unión entre ellos y el diálogo, para poder encontrar una situación conjunta al problema.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

MANEJO DE UN ATAQUE DE PÁNICO

Técnicas para afrontar un ataque de pánico

  1. Hacer análisis médicos para descartar enfermedades de carácter orgánico (en particular trastornos endocrinos, circulatorios, dificultades de tensión arterial...)
  2. Medidas de salud a seguir, propias de una vida ordenada: descanso, alimentación, ejercicio, diversión y cambio de actitudes.
  3. Llevar una vida normal, y no considerarse enfermo incurable.
  4. Evitar todo tipo de anticipación o pensamientos sobre la ansiedad: esta es la causa más importante del mantenimiento y crecimiento de la ansiedad. 
  5. Tener preparado un guión para decirnos es ese momento (este guión se ha podido preparar previamente con un psicólogo).
  6. Respirar hondo.
  7. Mirar algo y centrar la visión en el mundo externo.
  8. Continuar haciendo lo que estamos haciendo, o inventarnos una tarea. 
  9. Esperar los minutos necesarios para relajarnos.
  10. No enfadarse, dado que esta ira contribuye notablemente a que la próxima vez parezca peor que la anterior.
  11. Dejarse ayudar por un profesional.


ATAQUES DE PÁNICO PREVALENCIA

Los ataques de pánico suelen comenzar en la adolescencia tardía o en la edad adulta (a partir de los 30 años de edad). Es más incidente en mujeres que en hombres, siendo la prevalencia en la población general de un 1,5-3.5%. A menudo cursa con otros trastornos psiquiátricos como la depresión, en un 30-50% de los casos, o el alcoholismo, en un 35% de los casos.


Al ser difícil su diagnóstico, se estima que el 16% de niños y adolescentes entre 12 y 17 años, podrían haber sufrido alguna crisis. Sin tratar, estos ataques pueden ser cada vez más y más frecuentes produciendo un trastorno de pánico.
Cuando el trastorno de pánico no es diagnosticado, y por consiguiente no hay un tratamiento, se pueden producir severas complicaciones que afectarán al desarrollo normal del adolescente:


  • Como consecuencia de los ataques de pánico, el niño o adolescente comenzará a sentirse muy ansioso aún cuándo no esté sufriendo un ataque de pánico. 
  • Verá afectadas sus relaciones sociales, y comenzará a evitar situaciones que él o ella cree que puede producirle un ataque.
  • En los casos más graves, se puede desarrollar una agorafobia.
  • Puede aparecer una depresión mayor con riesgo de pensamientos suicidas
  • Para reducir la ansiedad y los ataques de pánico, los adolescentes pueden recurrir al alcohol u otras drogas.


ATAQUES DE PÁNICO

Un ataque de pánico se conoce también como un trastorno de pánico o crisis de angustia, y consiste en un fuerte temor, malestar, inseguridad, acompañado todo de una sensación de riesgo inminente. Es un tipo de trastorno de ansiedad y es repetitivo ante el miedo de algo que va a suceder.
Las causas que producen un trastorno de pánico se desconocen, aunque se piensa que puede ser hereditario, debido a algunos genes que pueden desempeñar un papel importante a la hora de desarrollar este trastorno, aunque puede darse en personas que no tienen ningún antecedente familiar.
Los ataques de pánico tienen su punto álgido a los 10-20 minutos de haberse producido, y pueden durar una hora o más.







El riesgo más grande de los ataques de pánico es que puede llegar a confundirse con un ataque cardíaco.
Las personas que han sufrido ataques de pánico suelen tener temor y miedo de sufrirlo de nuevo.
Para que se considere un ataque de pánico, la persona debe haber sentido al menos 4 de los siguientes síntomas:

  • Dolor torácico o molesta en el pecho.
  • Desmayo o mareos.
  • Temor y miedo a morir.
  • Miedo ante la pérdida de control o ante una muerte inminente.
  • Sensación de asfixia.
  • Sentimientos irreales o de separación.
  • Nauseas.
  • Entumecimiento de las extremidades (en especial de las manos y de los pies) y de la cara.
  • Palpitaciones y un aumento de la frecuencia cardíaca.
  • Dificultad para respirar, sofocos, mareos, sudoración, incluso escalofríos.
  • Estremecimiento o temblor.

martes, 24 de noviembre de 2015

TRATAMIENTO FOBIA SOCIAL

El tratamiento para la fobia social, se centra en la psicoterapia, aunque en ocasiones se utilizan ansiolíticos o antidepresivos para ayudar a reducir los síntomas de este trastorno de la ansiedad.

El tratamiento farmacológico, sobre todo en caso de optar por antidepresivos, tiene que estar estrictamente controlado por un médico. En caso de los adolescentes y niños, está desaconsejado su uso y se sigue estudiando, ya que puede producir pensamientos suicidas entre otros efectos secundarios, además de no estar probado su beneficio en estas edades .

En cuanto a la psicoterapia, existen diversas técnicas efectivas, por lo que se debe consultar con un profesional sobre cuál o cuáles serán las más beneficiosas para el adolescente o niño:
  • Terapia cognitivo-conductual: es la terapia con mayor eficacia para tratar la fobia social. Se centra en cambiar los pensamientos negativos que aparecen en situaciones sociales concretas, por otros más sanos que le permitan afrontar dichas situaciones. Además se le enseñan habilidades sociales, ya que en las personas que padecen fobia social existe una carencia en estas habilidades.
  • Terapia de exposición: es un componente esencial en el tratamiento de este trastorno. En ella se expone al paciente de manera sistemática y gradual a las situaciones que le generan temor hasta que éste consiga afrontarlas con un grado de ansiedad tolerable. Esta exposición se lleva a cabo en situaciones reales o bien simuladas (por ejemplo mediante juegos de rol).
  • Entrenamiento en técnicas de relajación: esta técnica es bastante utilizada para el tratamiento de los trastornos de ansiedad. Consiste en enseñar a la persona a controlar de la mejor manera posible el nivel de activación fisiológica como respuesta de la ansiedad. De entre los distintos tipo de relajación que existen, el más utilizado es la relajación muscular progresiva de Jacobson: